La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó este jueves que agentes estadounidenses hayan participado en un operativo contra narcolaboratorios en Sinaloa, tal como lo aseguró el Gobierno de EE.UU. en un comunicado que incluso incluyó fotografías difundidas por medios locales.
«La información es falsa», declaró Sheinbaum, al referirse específicamente a una imagen publicada en primera plana por el diario La Jornada, donde supuestamente se ve a agentes de EE.UU. viajando en vehículos del Ejército mexicano rumbo a Sinaloa. Según la presidenta, esa foto no corresponde a ninguna acción realizada en territorio mexicano.
En su boletín oficial, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) informó que una unidad de Investigaciones de Seguridad Nacional encabezó una operación que resultó en el desmantelamiento de tres laboratorios clandestinos de drogas sintéticas a gran escala, además del decomiso de precursores químicos y narcóticos. La Embajada de EE.UU. en México también replicó esta versión.
Sheinbaum fue enfática al afirmar que desde el inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y hasta la fecha, ninguna agencia estadounidense participa en operativos dentro de México, ni siquiera en tareas de coordinación.
Lo que sí ocurre, explicó, es que agencias de EE.UU. suelen presentar denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR) cuando detectan posibles laboratorios o cargamentos de químicos ilegales, gracias a trabajos de inteligencia. Con base en esas denuncias, es la FGR —a través de su policía ministerial o fiscalías especializadas— quien realiza las operaciones.
La mandataria subrayó que no se permite la participación directa de personal extranjero en territorio nacional. Además, criticó que a las agencias estadounidenses no les agrade que ya no puedan actuar en México como lo hacían en administraciones anteriores. «Quisieran seguir operando como en el periodo neoliberal», comentó.
El comunicado del ICE volvió a generar tensiones entre ambos países en el contexto del combate al narcotráfico. Esta fricción se suma a la polémica reciente por la entrega voluntaria en EE.UU. de 17 familiares de Joaquín «El Chapo» Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, un operativo en el que México no fue tomado en cuenta.