Tras recordar que Estados Unidos necesita trabajadores para desarrollar su economía, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo señaló que 80 por ciento de los ingresos de la población migrante mexicana se quedan en el vecino país; expuso que del otro lado de la frontera viven 38 millones de connacionales hasta de cuarta generación, y sólo cuatro millones no cuentan con documentos.
Durante la presentación de cifras sobre las aportaciones de mexicanos en EE. UU., la primera mandataria se pronunció en contra del lenguaje de criminalización contra los migrantes mexicanos y latinos, ya que se trata de desconocimiento de lo que significa su contribución.
“Es un tema esencialmente racista, y lo que nosotros estamos planteando es, en todo caso, que hay que platicar de esos cuatro millones de indocumentados con el gobierno de Estados Unidos.”
La directora general de Latino Donor Collaborative (LDC), Ana Teresa Ramírez Rodríguez, reportó que 34 millones de mexicanos en Estados Unidos son legales, residentes o ciudadanos.
Destacó que esta organización participa en la campaña “Protegiendo la fuerza de trabajo” en Estados Unidos para dar a conocer cómo nuestros paisanos empezaron con pequeños negocios y ahora encabezan grandes empresas en EE. UU.
Por ejemplo, 46 por ciento de las empresas de la lista Fortune 500 fueron fundadas por inmigrantes o sus hijos. Las empresas propiedad de latinos crecieron 44 por ciento entre 2018 y 2023; contribuyen con 800 mil millones de dólares anuales a la economía estadounidense.
En cuanto a mano de obra, la población migrante representa 51 por ciento de las granjas lecheras, 45 por ciento de procesamiento de carne; 29 por ciento en construcción; 20 en manufactura y agricultura; y 15 por ciento en educación y salud.
LDC proyecta que sean latinos 78 por ciento de los nuevos trabajadores estadounidenses entre 2020 y 2030; los jóvenes de origen mexicano representan el núcleo de este cambio en la fuerza laboral.
Resaltó los mitos principales en torno a lo que se piensa sobre los migrantes:
Primero, es falso que los migrantes aumentan la criminalidad, ya que los estados de la frontera son los más seguros, y cuando hay más población migrante existe menos criminalidad.
Segundo, es falso que sólo reciben beneficios y no contribuyen. En 2022, los indocumentados pagaron 96.7 mil millones de dólares en impuestos, incluye seguridad social, Medicare y seguro de desempleo, de acuerdo con reportes oficiales.
Contrario a la idea de que la población migrante es una carga para la economía, los indicadores registran que una de cada cinco personas empresarias estadounidenses era inmigrante en 2021 y generaron 95.6 billones de dólares en ingresos.